1. Todo ser aspira y respira; solo el
hombre aspira, respira y piensa.
2. El mundo está compuesto de energías
atómicas inteligentes, diversas e infinitas.
3. El hombre aspira los átomos afines a
sus pensamientos; porque el pensamiento en el hombre es la base de sus
aspiraciones y la aspiración forma el carácter y el futuro del hombre.
4. Las inteligencias atómicas infinitas y
diversas, que palpitan y llenan la naturaleza, esperan, ansiosamente, las
aspiraciones y respiraciones del rey de la creación, para servirle y
obedecerle. Cuando el pensamiento entre en los mundos de esta inteligencia se
apresuran a obedecer, entregando la clave del poder y de toda comprensión.